En pleno 2024, PayPal, una de las plataformas más utilizadas a nivel mundial para transacciones electrónicas, continúa sin habilitar la función de recepción de pagos en Bolivia. Esta limitación afecta directamente a emprendedores, freelancers y empresas bolivianas que buscan acceder al comercio global. Mientras países vecinos ya disfrutan de todas las funcionalidades de PayPal, los usuarios bolivianos solo pueden enviar pagos, pero no recibirlos, lo que complica su integración en la economía digital internacional.
PayPal es una plataforma de pagos en línea que permite a los usuarios realizar transacciones electrónicas de manera segura y rápida a través de internet. Fundada en 1998, PayPal ha crecido hasta convertirse en una de las soluciones más populares para pagar productos y servicios en línea, transferir dinero entre cuentas de diferentes usuarios y realizar compras en tiendas que aceptan este medio de pago.
¿Por qué no se puede recibir dinero en PayPal Bolivia?
PayPal basa sus operaciones en regulaciones financieras y en la disponibilidad de servicios bancarios compatibles en cada país. En Bolivia, las restricciones del sistema financiero y los requisitos de intermediarios bancarios parecen ser los principales obstáculos.
Según expertos, la ausencia de una regulación clara para plataformas digitales internacionales y la falta de acuerdos entre PayPal y los bancos locales limitan la implementación de la funcionalidad completa. Además, la crisis de divisas que atraviesa Bolivia en los últimos años podría ser otro factor que desalienta a la plataforma a expandir sus servicios en el país.
A pesar de los esfuerzos de algunos legisladores bolivianos que han buscado regular los servicios de PayPal con el objetivo de habilitar la recepción de pagos internacionales para los ciudadanos del país. Entre las principales voces de esta iniciativa se encuentra la diputada Mariela Baldivieso, quien ha enfatizado la necesidad de fortalecer el comercio electrónico en Bolivia a través de pasarelas de pago internacionales como PayPal. “Estamos trabajando para que Bolivia pueda integrarse plenamente al ecosistema digital global, permitiendo a nuestros emprendedores y profesionales competir en igualdad de condiciones”, expresó Baldivieso en una entrevista, subrayando que estas gestiones son clave para dinamizar la economía y atraer nuevas oportunidades al país.
Impacto en los usuarios bolivianos
Esta situación representa un desafío para los bolivianos quienes tienen negocios digitales a nivel internacional como nacional. Profesionales independientes en áreas como el diseño gráfico, la programación y la redacción, que suelen recibir pagos desde el extranjero, deben buscar alternativas. Muchas veces, estas alternativas implican altos costos, riesgos adicionales o procesos engorrosos.
Por ejemplo, los usuarios se ven obligados a recurrir a plataformas como Payoneer, criptomonedas o incluso intermediarios informales para acceder a sus ingresos. Estas soluciones, aunque funcionales, no cuentan con el mismo nivel de confianza ni accesibilidad que PayPal.
En algunos grupos de Facebook y otras redes sociales ofrecen la venta de cuentas de PayPal habilitadas en países vecinos, y ha estado convirtiéndose en un mercado creciente por la demanda de uso a plataformas como PayPal, si bien estos no son legales y pueden violar los términos y condiciones de la plataforma, parece ser una alternativa a corto plazo, PayPal podría tomar acciones e inhabilitar las cuentas.
¿Hay esperanza para el futuro?
La creciente digitalización de la economía boliviana podría presionar tanto a las autoridades como a PayPal para reconsiderar esta situación. La llegada de nuevas fintech al país y la apertura de mercados digitales podrían ser el primer paso para desbloquear esta funcionalidad.
Organizaciones de emprendedores y freelancers también han levantado su voz para pedir a las autoridades que trabajen en una regulación financiera más inclusiva. A medida que aumente la presión de estos sectores, PayPal podría reconsiderar su postura.
Mientras tanto, los usuarios bolivianos deberán seguir adaptándose a un entorno poco favorable para el comercio digital. Las alternativas disponibles, aunque útiles, distan de ser ideales. La falta de acceso total a PayPal no solo limita a las personas, sino que también frena el crecimiento del país en el ámbito del comercio electrónico global.